Difusión: la visualización de las emociones controlada por la bioautorregulación mediante electroencefalograma (EEG) Sentir, escuchar y tocar lo real a través de la actividad de las ondas cerebrales humanas

La difusión es un área de investigación en que se explora la relación interactiva entre la conciencia humana y la práctica informática con conexiones cerebro-ordenador mediante electroencefalogramas (EEG) y con otros dispositivos interactivos que analizan datos del cerebro humano para generar música e imágenes visuales sincronizadas mediante la bioautorregulación. A pesar de que las experiencias interactivas no son nada nuevo en el arte digital, esto nos lleva a la reflexión debido a la influencia de la tecnología en la ideología humana, las emociones, la moralidad, la ética, etc. La difusión es el resultado de los intentos de establecer una conexión entre la información fisiológica humana y la tecnología digital. Aparte de la investigación experimental, se basa en el grado de ética de la inteligencia artificial (IA). La difusión utiliza la visualización musical para transformar la actividad cerebral intangible (pensamientos o emociones) en algo que podamos percibir (sonidos u objetos). Con esta investigación se enfatiza la conciencia humana en la IA y se muestran los límites poco claros entre la IA y la creatividad humana. Así, la instalación evalúa la motivación humana, que puede presentarse como estructuras abstractas –como la creatividad, el sentimiento o la introspección– que mejoran la experiencia interactiva de las personas que participan y deconstruyen el significado inherente de lo material y lo espiritual, de la realidad y la realidad virtual o de los humanos y las máquinas. Al revisar y contextualizar el EEG y la investigación sobre la creación de música digital, esbozamos, por fin, una futura área de investigación que conllevará establecer una estrecha colaboración entre tecnologías distintas e interdisciplinarias para hacer realidad el reconocimiento de emociones.