Repressió, salvament i fugida a la reraguarda catalana, 1936-1939

Después que el levantamiento militar de julio del 36 fracasara en Catalunya, el proceso revolucionario obligó a huir a miles de catalanes vinculados a las clases dirigentes, a la Iglesia y a la derecha política catalana. La trascendental labor de personas anónimas, consulados extranjeros, pero en especial de consejeros de la Generalitat de Catalunya, propició que la nómina de asesinatos fuese mucho menos elevada de lo que podía preverse. Mediante la expedición de documentos como los visados y salvoconductos por parte de la administración catalana, de pasaportes falsos y el rápido y providencial embarque de perseguidos en diversos buques de bandera extranjera, decenas de miles de catalanes pudieron establecerse en el En este artículo se presenta un estudio sobre las Brigadas Internacionales a partir de registros y documentos procedentes de Moscú y Berlín. Los autores valoran si hubo o no una vigilancia y represión políticas en la Guerra Civil sobre los voluntarios brigadistas por parte de la Policía Secreta del Partido Comunista soviético (NKVD) y cuál fue el papel del Servicio de Información
Militar republicano (SIM). extranjero en un exilio temporal a la espera que el conflicto finalizara. Cuando éste finalizó, la mayoría ya se habían adherido a la causa franquista y muchos habían ingresado ya en la denominada España Nacional.